¿Cómo funcionan las subastas de arte?
De vez en cuando, en los medios de comunicación de todo el mundo aparece la noticia de alguna obra de arte que se ha vendido por una auténtica millonada. El arte lleva pasando de mano en mano entre particulares, museos y organismos públicos desde hace muchos siglos. Sin embargo, lo que ha cambiado es la manera en la que se gestionan estas transacciones que en muchas ocasiones implican grandes sumas de dinero.
Las subastas de arte llaman la atención tanto de artistas profesionales como amateurs, ya que son eventos en los que se ponen a la venta obras artísticas al mejor postor, pero lo cierto es que la mayoría del público en general desconoce cómo funciona una casa de arte. Por eso en este artículo vamos a profundizar un poco más en este tópico que llama la atención tanto de coleccionistas, como del público en general.
Un negocio mundial muy serio
A simple vista las subastas de arte pueden parecer algo muy sencillo, se tiene la idea que simplemente una persona se encarga de organizar un evento en el que los asistentes pujan por las obras que les interesan hasta que se alcanza un precio que nadie puede superar, ¿verdad? Parecen eventos llenos de glamour (como los que organiza la casa de subastas Christie’s) que como llevan funcionando muchos siglos, todo el mundo está acostumbrado a su sistema. Sin embargo, lo cierto es que antes de que se diga ‘¡Vendido!’, hay mucho trabajo previo.
Las subastas de arte como las conocemos hoy en día comenzaron en el sector del arte en el siglo XVIII y son un negocio que gestionan transacciones millonarias todos los años. Están dirigidas por una persona a la que se conoce como subastador y se pueden llevar a cabo en cualquier lugar del mundo. Las personas interesadas en los productos que se van a subastar pueden estar presentes de manera física o a través de un representante y si lo desean pueden mantener su anonimato.
Organizar una subasta de arte no es algo que sucede de la noche a la mañana ya que precisa de un proceso que se planifica con muchos meses de antelación que usualmente sigue el siguiente sistema:
- Se especifica el listado de las obras de arte que se van a poner a la venta.
- Se publica y envía un catálogo de subastas a compradores potenciales que pueden estar interesados en las piezas que se pondrán a la venta el día de la subasta.
- Durante el día de la subasta, los coleccionistas van pujando con sus paletas (aunque este sistema también ha variado un poco debido a la era digital) u ofrecen sus sumas de dinero a través de sus asistentes.
- Por último, cuando nadie puede superar la cifra del postor más alto, el subastador adjudica la obra al precio más elevado a golpe de martillo.
En cuanto a los artículos que se pueden subastar, hay un poco de todo. Los cuadros y pinturas tradicionalmente han sido las piezas estrella de las subastas de arte, pero cualquier cosa considerada como pieza de arte se puede llegar a subastar. De hecho, en la actualidad el auge del arte digital conocido como NFT ya ha llegado a cifras millonarias y está revolucionando esta industria.
Hay que recordar que siempre se pone un precio de salida en cada pieza artística, es decir, es la cantidad mínima que tendrán que pagar los coleccionistas si quieren llevarse a casa la obra. Pero en muchas ocasiones este precio inicial se ve ampliamente superado en la subasta ya que nadie puede predecir exactamente cuánto puede llegar a pagar un coleccionista millonario.
¿Cuáles son las casas de subastas de arte más importantes del mundo?
Aunque existen muchas casas de subastas en todo el mundo, sin lugar a dudas hay dos que destacan entre el resto:
- Casa de subastas Christie’s. Su origen se remonta hasta el siglo XVIII y por experiencia, trayectoria y calidad de las piezas artísticas que se ponen a subasta en sus eventos, es una da las casas de subastas más prestigiosas del mundo. Esta casa de subastas logró una cifra récord de 179,4 millones de dólares al subastar el cuadro Les Femmens de Picasso. Pero no ha sido la única obra que ha conseguido una cifra espectacular ya que el mismo año del cuadro de Picasso (2015), superó su propio récord al vender la pintura Nu Couche de Amadeo Modigliani por 170,4 millones de dólares (quien compró el empresario Liu Yiqian). Cuenta con 12 salas de subastas en Londres (2) Hong Kong, New York, París, Dubái, Ginebra, Ámsterdam, Milán, Shanghái, Zúrich y Bombay. Asimismo, opera en 53 oficinas de 32 países diferentes.
- Casa de subastas Sotheby’s. Casa de subastas que también data del siglo XVIII cuyas oficinas centrales se encuentran en Londres y New York y con salas de subastas en Toronto, Zúrich, Doha, Ginebra, Milán, Ámsterdam, París Madrid, New York y Hong Khong. Entre sus artículos subastados más costosos se encuentra el reloj más caro del mundo, ya que el Patek Philippe se vendió por más de 24 millones de dólares.